Un autobús lanzadera llevará hacia los nuevos edificios
El vehículo partirá de la rotonda del Clínico para trasladar a los estudiantes al resto de facultades
G. C. MÁLAGA La movilidad interna del campus de Teatinos una vez llevado a cabo el proceso de ampliación, que añade a la superficie actual un total de 1,2 millones de metros cuadrados, se ha convertido en una de las piezas fundamentales en la nueva configuración de la vida universitaria malagueña. A escasas semanas del inicio de curso académico, y lo que es más importante, a tres días de que el edificio que albergará las Escuelas de Ingeniería Industrial y Politécnica abra sus puertas para acoger los exámenes de septiembre, el Ayuntamiento y la Universidad parecen haber dado con la fórmula más adecuada para unir ambos espacios (edificios antiguos y nuevos).
Según explicó el vicerrector de Infraestructuras y Sostenibilidad, Rafael Morales, a La Opinión, el Ayuntamiento, a través de la Empresa Municipal de Transporte (EMT), habilitará un autobús lanzadera que trasladará a los usuarios hacia los nuevos centros. Si bien en un principio se planteó la posibilidad de prolongar el itinerario de las líneas de autobús urbano 20 y 22 hasta los terrenos de la ampliación, parece que ambas instituciones han optado por mantener el recorrido de ambas y acercar a los usuarios hacia la nueva zona en un vehículo independientemente, en este caso un autobús lanzadera que partirá desde la rotonda del Clínico. Así, los alumnos que acuden al campus desde el centro de la ciudad (línea 20 u 8) y de la zona de Carretera de Cádiz (22), deberán realizar el trasbordo al otro vehículo que finalmente les dejará en las inmediaciones de sus respectivos centros. Morales destacó que el acceso al bus lanzadera entrará dentro del bono especial para estudiantes que oferta la EMT, aunque no pudo precisar la frecuencia o el número de vehículos que realizarán este nuevo recorrido a falta de ultimar los detalles con el Ayuntamiento.
En la actualidad, la movilidad interna de Teatinos está fuertemente condicionada por las recién iniciadas obras de la línea 1 del metro, que con un tramo soterrado y otro en superficie, ha obligado a reordenar el tráfico en las inmediaciones del bulevar Louis Pasteur, vía principal del campus.
